En el sueño hecho realidad estuvo el bertsolari guipuzcoano Jon Maia, buscando su apoyo para que, con su colaboración, toda Euskadi se entere de que Rioja Alavesa tiene un patrimonio en su olivar, y un Aceite de Oliva Virgen Extra desde hace cientos de años, que forma parte de su Cultura y Tradición.
MIKEL Izagirre, Jon Maia y Dounia El Kouissi en el trujal de Erroiz de Lanciego.
“A ver si conseguimos que esa pregunta tan común ‘¿Pero en Rioja Alavesa hacéis Aceite de Oliva?’ se convierta en una anécdota del pasado”, le dijo Mikel Izagirre, del Trujal Erroiz, al bertsolari Jon Maia al comienzo del encuentro.
La frase del bertsolari que ha participado ya en cuatro finales del Campeonato de Euskadi estuvo a la altura del día “¡Qué barbaridad de aceite, qué diferencia de calidad de los que yo conozco!”
“Queremos darle aún más vida a nuestro Aceite y a nuestros Olivos, contarlo a toda Euskadi, sacarlo a la palestra”, fue el deseo expresado por Mikel y Dounia a Jon Maia.
ANTIGUOS cestos de la familia preparados para la recogida soñada en los olivos centenarios.
El plan del día – explicó Mikel- será acercarnos a un olivar centenario «donde recolectaremos algunas aceitunas, para que veas cómo es ese trabajo. Recogeremos las olivas por el sistema de ordeño, con las manos sobre la cesta, luego vendremos al trujal, elaboraremos algo de aceite y llenaremos algunas botellas. Por último haremos una cata del aceite trujalado estas semanas».
“Yo tampoco sabía nada del Aceite de Oliva Virgen Extra de Rioja Alavesa –confesó Jon Maia-, así que por lo menos ya habéis llegado a una persona más. Perdonar mi ignorancia. Es cierto que había visto olivos al pasar por Rioja Alavesa, pero nada más sabía”.
MIKEL con Jon Maia, que por primera vez en su vida ‘ordeño’ olivas de las ramas del árbol.
“Ahora intentaré que se conozca algo más. Hoy es un día muy bonito, ayer domingo (por el 1 de diciembre) canté en el Campeonato de Gipuzkoa de Bertsolaris y gané mi semifinal. Hoy estoy recibiendo muchos mensajes y pasar este día aquí para mí es algo muy especial”.
Después de reír y confraternizar con Jon Maia, de pasar del euskera al castellano y del castellano al euskera, Mikel animó la mañana: “Bueno, pues nos ponemos en marcha!”.
ALGUNAS de las olivas recogidas en la jornada del lunes 2 de diciembre.
«El aceite me llena la cabeza de recuerdos»
En la comitiva nos acompañaba Jorge Martínez Bravo, director de Zeytum, del pueblo de Arnedo, en La Rioja, vinculado desde hace ocho años al aceite de Rioja Alavesa. “Gracias a Fernando Martínez Bujanda -comenzó diciendo al Blog-, que fue el impulsor de la recuperación del aceite de oliva en Rioja Alavesa”.
A partir de ahí prepararon unas jornadas dos años consecutivos. Así entraron en contacto con todos los productores y trujaleros de la Comarca, en Moreda, en Oyón y en Lanciego, “lo que nos permite disfrutar de momentos hermosos como el de hoy”.
Jorge Martínez Bravo realizó durante tres años un estudio para identificar “el momento idóneo” de recolección de la variedad Arroniz en Rioja Alavesa. Para eso utilizaron un índice de madurez colorimétrico, que cualquier agricultor puede llevar a cabo.
JORGE Martínez, entre Jon Maia y Mikel Izagirre, bien rodeados de olivos de Lanciego.
“Se va al campo, se recogen 100 aceitunas de los olivos, en una muestra heterogénea de todo el olivar -explica-, valorado las olivas en función del color, si es verde, amarillento, entreverado, si la carne de la aceituna está blanca o morada. Y en función de las aceitunas que hay de cada color, se le da una valoración”.
.- ¿Cuál es el momento idóneo, el mes para la recolección en nuestros pueblos?
Antes se recogían las aceitunas en diciembre, incluso en enero. Pero el momento óptimo es noviembre, llegando a recogerse hasta finales de diciembre.
HACE ya unas semanas que las aceitunas se pueden transformar en un gran aceite.
.- ¿Cuál es tu formación, Jorge”
Soy un hombre de campo, un técnico agrícola, que se ha especializado como experto en Cata de Aceite de Oliva por la Universidad de Jaén.
.- Decir “Aceite de Oliva Virgen Extra” para ti es decir…
Uy, muchos sentimientos a la vez. Yo valoro mucho lo que cuesta conseguir un litro de aceite de oliva. Con jornadas como la de hoy, en la que se va al campo, se cosecha durante un rato, aunque sea de manera simbólica, ya se puede apreciar y valorar lo que cuesta recoger kilos y kilos de aceitunas.
LA alcaldesa de Lanciego se sumó a la comitiva para impulsar el aceite de la Comarca.
Estamos sacando un rendimiento mucho más alto que nunca, obteniendo aceites más verdes, más aromáticos, más potentes, y en boca más amargos, más picantes también, y con muchos más antioxidantes, con muchos más beneficios para el organismo humano.
.- ¿Cuáles son tus recuerdos de infancia vinculados al aceite?
Con 4 añitos iba con mi familia a la casa de la Pascuala, a Tudelilla, donde estaba el trujal familiar de esa señora, entrando por el patio donde tenía sueltas las gallinas. Nada más entrar a la casa olía a aceite, olía a vida, a calor, a todo, y nos comíamos unos huevos y unas patatas fritas fantásticos que nos sabían a gloria.
Aquel no era el mejor aroma del aceite de oliva, pero si hoy vuelvo a oler aquellos aromas, se me llena la cabeza de buenos recuerdos.
PRIMERA lección, junto al olivo, para explicar cómo se recogen las olivas.
La justicia poética del bertsolari
El día dio mucho de sí. Hubo cata de dos aceites en el ayuntamiento de Lanciego, uno de ellos «Abuelari» que apadrina el bertsolari. Hubo bertsos cantados, cómo no! Y una comida fraterna en la que maridaron muy bien Aceite y Vino de Rioja Alavesa. Y hubo una conversación muy sincera, de gran interés para todos.
CATA de Aceite en el Ayuntamiento, donde se sumó Fernando Martinez Bujanda.
Tras las patatas a la riojana y las chuletillas al sarmiento, tras los cafés, conversé con Jon Maia, a quien comencé pidiendo una crónica del día que habíamos pasado en Lanciego.
“Ha sido un día muy especial, por la historia tan bonita a la que me han invitado, haciéndome pensar en el nombre de un producto para el aceite de oliva virgen extra de la aceituna Arroniz…
“He venido con una alegría extra a Lanciego, porque vengo de cantar este domingo en el campeonato de Gipuzkoa de bertsolaris, donde me he clasificado para la Final de Gipuzkoa. Venir de Zumaia hasta Laciego me resulta en este contexto una sensación placentera.
FERNANDO M. Bujanda en charla animada con Jon Maia y Mikel Izagirre.
.- ¿Qué más cosas has de decir en tu crónica?
He de decir, como sabes, que hemos conocido el proceso de elaboración del aceite, recogiendo durante un rato las aceitunas del olivo… He visto una familia volcada en un hermoso proyecto alrededor de su trujal, con una gran ilusión, y peleando duro.
.- ¿Cuándo supiste que en Rioja Alavesa había olivos centenarios y se elaboraba aceite de oliva virgen extra?
Cuando me llamó Mikel Izagirre. Sabía que en Navarra se hacía aceite, pero no lo relacionaba con Álava. Mikel me recordó que un día me paró en una calle de Lanciego, donde vine hace dos años a visitar una pequeña bodega.
EL DÍA dio para fotografiar estorninos y realizar varias entrevistas para diferentes radios.
.- Para ti Rioja Alavesa era vino, y nada más.
Era vino. Rioja Alavesa para mí era vino.
.- ¿Qué pasó a partir de esa llamada?
Mikel me dijo que pensara en un nombre para una etiqueta de un aceite, como si yo apadrinara ese aceite. En aquel momento no me vino ningún nombre a la mente. Era un reto, pero aún no sabía de qué manera lo resolvería.
Un tiempo después, me volvió a llamar. “Qué Jon, ¿ya has pensando el nombre para el aceite?”. Entre mil cosas, no lo había pensando. Entonces me puse a pensar y me di cuenta de que tengo una historia con los olivos.
EN un cesto se sumaron las aceitunas que todos recogieron…
.- “Una historia con los olivos”, suena bien.
Mikel me comentó que conocía un poema mío que se llama “munduan leku bat”, un lugar en el mundo, sobre mi abuela y sus olivos. Pero no me había venido a la mente.
En aquel poema cuento que mi abuela perdió sus olivos extremeños en la posguerra civil, confiscados. Y es más: cuando mi abuela murió los nietos le plantamos un olivo en frente de su casa, en Zumarraga (Gipuzkoa).
JUNTO a la zaranda, donde antiguamente caían las olivas recogidas y se quedaban las hojas.
.- Entonces tuviste claro qué nombre ponerle a una parte del aceite de oliva que trujalan en el Erroiz de Lanciego.
Me pregunté “¿Qué nombre le pondría… Le voy a poner “Abuelari”, que es muy fácil, una palabra en castellano con el sufijo en euskera, que significa “A la Abuela”. Un nombre que evoca algo, porque las abuelas evocan historia, familia, vida.
ERROIZ ha elaborado 2000 botellitas con el nombre ABUELARI, de Jon Maia.
.- ¿Cómo se llamaba tu abuela, y qué historia te evoca?
María Luisa Valderrama. Era extremeña, de Cabeza del Buey. Era muy graciosa y refranera, muy popular en Urretxu y Zumarraga, donde vinieron a vivir. Se hizo famosa porque la mencioné en un bertso, en mi primera final de Euskalherria, en 1997, en el bertso de despedida de aquella final. En aquel bertso para mencionarla dije “Abuela” para que ella supiera, ya que me estaba viendo en la tele, que la estaba mencionando.
Nos hicieron entrevistas, salimos juntos en alguna portada mi abuela y yo. La gente la paraba por la calle. Fueron para ella unos días de gloria y alegría.
MOMENTO en el que Jon pega una etiqueta de Abuelari a una de las botellas.
.- Ella perdió sus olivos en Extremadura, y ahora…
El aceite hoy tiene esa poética de evocar a mi abuela, que perdió sus olivos al perder la guerra. Y ahora yo le devuelvo un aceite. Es justicia poética.
Este nombre de “ABUELARI” es un encuentro de culturas, la de aquellos emigrantes que llegaron y la cultura de esta tierra.
CON este arrobo se preparó toda la jornada para degustar los aceites del trujal Erroiz.
Poco después de entrevistar a Jon, me despedí de todos los presentes, no sin antes comprarle a Mikel dos litros de aceite de su Erroiz.
.- ¿Qué me llevo en esta botella de dos litros de Aceite?
Te llevas un aceite de oliva virgen extra de una calidad que no vas a encontrar en ningún supermercado de Euskadi, y quizá no te haya salido tan económico, pero a la larga vas a saber entender la diferencia de la calidad que te llevas contigo. El aceite de aquí es un pelín más caro, pero la calidad, ah la calidad, es infinitamente mayor
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Gracias al Blog y a Julio por acompañarnos y ayudarnos a difundir la pasión de esta Comarca por su tierra y por sus centenarios olivos. Un día fantástico!
Muchas gracias, Jorge Martínez Bravo, de Zeytum. Sí que fue un hermoso día (suerte tuvimos que la lluvia se contuvo, dejándonos hacer), sin duda. Saludos cordiales.
Qué gozada de encuentro! Los olivicultores de Rioja Alavesa haciendo aceites saludables e impulsando el mundo de la Cultura. ¿Qué más se puede pedir?… ¿Que cunda el ejemplo?
Hermosa historia la Justicia Poética que nos cuenta Jon Maia. Me encanta!!
Muchas gracias, Arene Amezaga. Eso, que cunda el ejemplo. Un cordial abrazo.
Aupa!!!!
Zorionak Jon!!!!
Me gustaría saber a cuánto está la botellita ABUELARI, mesedez.
Besarkada Bat
Eskerrik asko, Txiki. Las botellas de aceite «Abuelari» saldrán al precio de 15 euros (es el aceite más selecto del Trujal Erroiz). Y una segunda cosa muy importante, es que Jon Maia ha decidido que el 30% del dinero que se obtenga irá a parar a la Bertso Eskola de Rioja Alavesa, que se encuentra en Oion.
Besarkada.
Qué grande eres, Jon. Prodigando tu cercanía y tus dones a la serena y pequeña grandeza de la Rioja Alavesa.
Ze ondo!
Eskerrik asko, Jon Artetxe. Saludos cordiales.
En la cata del 2 de diciembre, en Lanciego, me encontré con un grupo de amigos, todos grandes entusiastas de nuestro aceite de Rioja Alavesa.
Pero no conocía a Jon Maia, y solo puedo comentar que su sensibilidad, amor a esta tierra, su manera de cantar y hablar de su familia en general y de su abuela, en particular, me demostraron que es una persona con gran bonhomía (sencillez, unida a la humildad).
El conocerlo me dejó un gran sabor de boca, sabor que no se si aún mejoró con el aceite catado de Erroiz.
Lo que si sucedió es que la conjunción de los dos sabores, hizo que persistieran con más intensidad.
Muchas gracias, F. Bujanda Ciordia. Qué bonito lo cuentas. Un cordial abrazo
Zorionak para Jon Maia y su clasificación para la final de Gipuzkoa. Qué envidia me dais los que habéis estado con él, sobre todo por haber tenido la oportunidad de esa bertso bazkaria con un bertsolari de lujo.
Muy buena elección la de «Abuelari» para ese aceite tan rico, me gusta mucho.
Que el 30 % de lo recaudado se destine a la bertso eskola de Oion dice mucho de Jon Maia, es un txapeldun con mayúsculas.
Eskerrik asko, Karmele. Un cordial abrazo.