Abrazado a la tradición de su abuelo Luis, arremangado ante el presente que encarna su padre Juan Luis, el joven Cañas vive dispuesto a darlo todo hasta el último día.
“Hay que luchar hasta que te quiten el bombín de la puerta. Tengo muchas familias detrás, y a compañeros que quiero y estimo. Entre todos vamos a hacer que esto siga adelante”, asegura con convicción, sabedor del momento enrevesado por el que atraviesa el sector, que se duele y llora, según sus propias palabras.
Amarrado al destino de sus tres bodegas, Luis Cañas, Amaren y Dominio de Cair. Libre como el aire en la época de los grandes cambios, batallando con otros en la compleja globalización del sector.
A la templanza y la serenidad que le caracterizan, Jon suma hoy la rotundidad de sus palabras para defender un cambio de actitud en todos los actores del panorama vitivinícola, comenzando por sí mismo.
“Debemos cambiar todos, desde el agricultor a las bodegas, la DOCa Rioja o las Instituciones. No echemos la culpa a nadie. Todos tenemos que cambiar. Y no rendirnos”.
Abre la puerta de Bodegas Amaren, en Samaniego, para encontrarse con una gran fotografía de su abuela Ángeles Herrera, la madre de su padre Juan Luis Cañas Herrera.
.- ¿Le dices algo a la abuela mirando su fotografía?
La miro y pienso que ojalá estuviera entre nosotros para que hubiese visto lo que hemos hecho y dónde hemos llegado.
Mi abuelo y mi abuela se fueron de este mundo luchando y trabajando. Ese es su legado, una herencia que impulsa. Eran de otra mentalidad. Nosotros no hemos pasado hambre. Ellos sí.
.- De generación en generación. Es una rueda que no para.
Fidel Fernández suele decir que la vida es un círculo, que damos vueltas, que todo vuelve. Mi madre siempre cuenta que los fines de semana mi aita quería hacer muchas cosas, y mi abuelo no.
.- Así que discutían.
Mi ama y mi abuela les decían “dejad de discutir, quereros”. Luego me pasó a mí lo mismo con mi aita… Ellas sí que saben.
.- Tu aita Juan Luis ha venido siendo el impulsor de todo esto.
Mi aita fue el que empezó a viajar. Yo voy intentando acercarme a él, aunque es muy difícil llegar a su altura. Intento seguir su estela, sabiendo que tengo el listón muy alto.
Un momento delicado
Acordamos la entrevista por teléfono. Comentamos la noticia de Vinetur, en la que se informa que “el vino californiano” está “al borde de la muerte, con descenso de ventas y precios por los suelos”.
Ha caído el consumo, Burdeos ha arrancado miles de hectáreas de viñedo, las nuevas generaciones no se incorporan como sus padres y abuelos al consumo de vino, las viñas de Rioja se cotizan a la baja…
Es como si bajo ese panorama global la Comarca y con ella toda la DOCa, fuera hoy más barata que hace un año. Ante esos frentes abiertos quiero saber cómo se enfrenta él, un joven de 37 años, a un momento tan delicado.
.- Está siendo un curso difícil, Jon
Me preocupa el pesimismo que se ha instalado en la Comarca.
.- ¿Se asienta o no en bases sólidas?
Miremos lo positivo. Yo estoy muy orgulloso de las bodegas que han cambiado sus elaboraciones para hacer unos vinazos estratosféricos en nuestra tierra. Desde Tentenublo, Loli Casado, Ostatu, Artuke, Itu el de San Vicente… y muchos más, innovando, identificando lo que es la Sonsierra.
Y además, vamos juntos de la mano, diferenciándonos. Es lo que tenemos que hacer contra la crisis. En mi opinión nos estamos quejando mucho, pero la culpa la tenemos todos si no somos capaces de reaccionar.
Volver a la senda del prestigio
.- ¿Qué tenéis que hacer?
Diferenciarnos y darle valor a las uvas y al vino para defender nuestra Comarca, para defender a los agricultores, al pueblo, a nuestra cultura, para que Rioja Alavesa-Sonsierra y la DO Rioja vuelva por el camino del prestigio. De otra manera nos estamos desprestigiando, dando al exterior una imagen de debilidad.
La solución, por ejemplo, no es bajar los precios del vino. Además, nosotros bebíamos antes 20 litros por persona, pero ahora el ratio está en 11 litros.
Por bajar el precio no se va a beber más. Lo que harás será desprestigiar tu marca y el trabajo que has hecho durante años. Y si bajas los precios vas a tener que pagar la uva a un precio menor. Además, bajando el precio de tu vino desprestigias también a los demás.
.- Tim Atkin daba una de cal y otra de arena. “Hay que alejarse de los precios baratos y los vinos corrientes”, pero a la vez estima que “los mejores vinos siguen superándose a sí mismos”.
En todos los sectores hay diferentes ligas. Algo que me ha enseñado mi aita es que debemos preguntarnos “¿cómo queremos que nos vean dentro de cinco años?”.
«Ese sentimiento de piel de gallina»
.- ¿Cómo quieres tú que os vean?
Quiero que nos vean, a la Casa y a la Comarca, con un mayor prestigio.
Me fascina cuando viene un australiano a decirme que quiere hacer las prácticas en mi casa. Eso es muy bonito. Significa que Rioja Alavesa ha llegado a Australia. Algo hacemos bien. Todos debemos pensar en ello. Aquí hay una historia muy fuerte detrás, con muy buenos agricultores…
Es lo que sucede con las antxoas de Bermeo, que se sepa quién es el pescador, que se sepa que su aita murió en el mar. Creo que hemos perdido un poco ese sentimiento de piel de gallina para convencer a todo el mundo, periodistas, sumilleres, clientes…
.- ¿Con esa fórmula se va a consumir más vino?
Seguramente no, de momento, pero al menos que cuando consuman nuestros vinos valoren lo que tienen entre manos, lo que prueban, lo que comen.
.- ¿Desde cuándo se te eriza a ti la piel con el mundo del vino?
Soy muy sentimental, pero cuando te haces mayor, ahora tengo 37 años, un día te pones a valorar todo lo que ha luchado mi abuelo, cómo lloraba en las vendimias, o mi madre.
Los petardos de las vendimias
.- ¿Lloraban?
También mi padre cuando pasó el COVID… ¡Cómo se emocionaba por los demás! Cuando se hacen las cosas con sentimiento son muchas las cosas que te tocan de verdad.
.- ¿Qué me dices de ti?
Que he conseguido hacer un equipo para poder liderarlo, delegando el trabajo, para que con sus sueldos tengan la posibilidad de comprarse una casa, y puedan casarse y tener hijos… Al final somos la máquina del tren que defiende el viñedo y crea riqueza. Nos sentimos responsables de eso.
Se me eriza la piel y me emociona mucho las cosas que hacemos porque aquí está metido el esfuerzo de mucha gente. Qué decir de cuando vienen todos los años los agricultores de Jaén a podar, o a la vendimia, y luego nos invitan a sus bodas. ¡Como para no tirar petardos en vendimias!
.- Es una forma intensa de vivir.
No sé si todo esto se entiende. Hay gente que le gusta entrar a las 7 de la mañana y marcharse a las 15horas, pase lo que pase, “como si se desborda el lago”, pero aquí hay un valor añadido. Aquí estamos creando muchas cosas.
Y sí, por supuesto, duele cuando el sector llora. Duele porque hay gente que es enóloga o ingeniero agrónomo que no ve la calle, pero la calle sufre. Cuando ves que la Rioja Alavesa está desapareciendo de las cartas de algunos restaurantes, es porque la estamos desprestigiando. Y eso es culpa de todos. Hay que volver a situar Rioja Alavesa donde merece estar.
«Todos debemos cambiar»
.- ¿Cuántos años llevas directamente implicado en la bodega?
Once años, desde que tenía 26.
.- ¿Nunca sentiste como ahora que el sector lloraba?
No. Es verdad que he visto sufrimiento en 2017. Antes de estar implicado profesionalmente en la bodega, recuerdo aquellos momentos delicados de la bodega para conseguir pagar todas las nóminas. Pero en 2017 vi el sufrimiento del pueblo, cuando todos nos acercamos al viñedo para ver cómo había sido golpeado por el clima.
Y ahora, en 2024, es la época de los grandes cambios. Debemos de cambiar todos, desde el agricultor, las bodegas, la DOCa, las Instituciones. Entre todos tenemos que ayudarnos y volver a crear prestigio.
.- ¿En qué debe cambiar cada cual, agricultores, bodegas, DO e Instituciones?
Las instituciones tienen que apoyar mucho más al sector para conseguir abrir puertas y ayudarnos a salir. Las bodegas tienen que luchar como nunca por la diferenciación de los vinos. Y nunca se harán buenos vinos sin buenas uvas.
El agricultor tiene que trabajar sabiendo que sin ellos no somos nada. El viñedo es el auténtico tesoro, da igual que tengas ánforas, depósitos de cemento, barricas… Todo eso son pucheros. Lo importante son las viñas, las cuales han de ser ecológicas, más sostenibles, protegiéndolas de la erosión genética.
45 variedades plantadas por los abuelos
.- Danos un ejemplo de lo que tú haces.
Tengo viñas jovencitas, plantadas hace cinco años, a las que aún no quiero sacar ni una uva. A las que no les meto una máquina. Vamos a proteger el suelo. A un niño no le pones una mochila con 20 piedras. Tenemos una riqueza varietal increíble, que no hay en ningún lado.
Nuestros abuelos plantaron aquí hasta 45 variedades, que hoy pueden ser soluciones para que nuestros Tempranillos no se degraden. Hay que darle valor a todo esto. Solo en dos kilómetros a la redonda tenemos 180 clases de Tempranillo. Tenemos Garnachas ancestrales que hoy elaboro con 13 grados. Cuando una Garnacha de un viverista te da 17 y 18 grados.
.- “Hay que darle valor”, dices.
No puede ser que venga alguien y te pague 35.000 euros por una hectárea de viñedo. Es un insulto. Tiene que valer por lo menos 90.000 euros. Y el kilo de uva, si estás recogiendo 4000 kilos por hectárea, hay que pagarlo a 2 euros, a 2,50 euros, porque si no se acabará arrancando.
«La DO Rioja no es ajena, es nuestra»
.- ¿En qué debe cambiar la DOCa Rioja?
La DO tiene que ir de nuestra mano. La DO no la han creado otros. La DO la hemos creado nosotros. La DO a veces parece ajena, pero es nuestra. Parece que la hemos contratado, pero la hemos creado entre todos. Tienen que escuchar nuestro pensamiento, nuestra inquietud.
Me entristece ir a la gasolinera y ver un vino Gran Reserva de Rioja a 1,50 o 2 euros. Pero si solo en el corcho y la botella ya me he gastado casi ese dinero. No puede ser. No echemos la culpa a nadie, ni a otras zonas, ni a los de abajo o los de arriba. No. Todos tenemos que cambiar, y cada uno en nuestro huequito hacer cosas que suban el prestigio.
.- Tienes esperanza en ese cambio que pregonas.
Creo que todos vamos a cambiar. Es ahora o nunca. La vida nos va a poner en nuestro sitio. No va a quedar otra.
El consumo, el comercio, el mundo nos va doblar el brazo. Es triste porque muchos vamos a sufrir. Mi aita dice que es un desierto que vamos a tener que atravesar. La única forma es trabajar más, quizá para conseguir la mitad, pero intentar acabar el año lo mejor posible, y aguantar. Ojalá la gente valore el esfuerzo.
.- Piensas mucho en la Comarca, según veo, pero ¿está Bodegas Amaren y Luis Cañas en una mejor situación que otros muchos?
Me gustaría que mi aita disfrutara mejor de sus vejez, pero se siente responsable de todo esto, por eso ha estado en muchas asociaciones, no solo para mejorar el mundo del vino, sino pensando que hay que dejar las cosas mejor que como las encontramos.
Ayudar al agricultor / Ayudar a la Comarca
Se equivoca quien piense que en la familia Luis Cañas somos unos privilegiados. Aquí no ha habido socios, todo ha sido a base de trabajo, pedir dinero, pagarlo… La cuestión es que hemos intentado inculcar nuestros sentimientos a nuestros trabajadores, a nuestros distribuidores, y al final hemos creado una marca.
.- Todo empezó hace más de cincuenta años con tu abuelo Luis Cañas…
Siendo Amaren y Cair los hijos a los que les cuesta más crecer, a los que hay que cuidar. Porque parece que íbamos bien, llega el COVID y te caes, y luego viene la guerra en Ucrania y te vuelves a caer. Pero siempre con la idea fija de ayudar al agricultor y a la Comarca.
Tenemos una responsabilidad social. Parece que el mundo del vino está solo, pero además están las barricas, las botellas, las cápsulas, los corchos. Si tú lo pasas mal, ellos lo pasan mal.
.- Cuántas veces se ha dicho que las crisis brindan la oportunidad de tomar un camino diferente.
Digamos algo importante. Nosotros no hemos pasado hambre como nuestros abuelos. Nosotros hemos pasado crisis, que es otra cosa. Pero si tenemos alguien al lado que dice que “todo es una mierda”, y lo repite una y otra vez, al final acabaremos diciendo lo mismo.
En mis conversaciones con mi aita, con mis comerciales, con la dirección técnica y mis propios compañeros yo digo que “ahora es el momento de pensar más, de hacer más cosas, de desarrollar mayores estrategias comerciales, de mayores eventos, de invertir tiempo en asociaciones con otras bodegas, el momento de unirnos más y mejor”.
«Aquí tenemos muchos tesoros»
.- Estamos de acuerdo, Jon.
Es el momento de reinventarnos porque los que estemos ahí saldremos mejor parados.
.- ¿Hay musculatura social para eso? ¿Hay mimbres en la Comarca y en Rioja?
Creo que somos privilegiados. En Rioja Alavesa tenemos muchos tesoros.
Tenemos gente joven que no debería marcharse. Tienen que estudiar y tienen que viajar, pero tenemos que hacerles volver para que defiendan esto.
Me viene a la cabeza Juan Valdelana, un defensor de todo esto, como yo. O Luis R., con esa zona maravillosa, con esos barrancos… Y tantos otros.
.- Hablando de ti, Luis Rodríguez, de Lantziego, me dijo el otro día que tú eres “la máxima expresión del futuro de Rioja Alavesa”.
Qué tío. Le quiero mucho.
A sus padres les conocí en mi primer viaje a Portugal, cuando tenía 26 años, y me acogieron como a un hijo en ese viaje. Son tan luchadores como encantadores. Cómo no te vas a emocionar con gente así.
Como Teodoro Ruiz Monje, de San Vicente, con su primo Itu, con su forma de interpretar los vinos. Como Arturo de Miguel, o Loli Casado y su marido, como la familia Ostatu o Roberto de Tentenublo… Son gente que luchan en la misma dirección que nosotros.
Hemos de juntarnos para crear una asociación de excelencia, igual que ha hecho la marca colectiva Corpinnat con el cava, pensando que aún podemos subir un escalón más.
Una asociación en pro de la excelencia
.- Una asociación…
Como Corpinnat, dejando a un lado la productividad, de no comprar ni vender graneles, de a tanto la hectárea, de ayuda mutua, sin salirnos de la DO, como Corpinnat, en pro de la excelencia.
.- El otro día me dijiste que “los vinos son los únicos que dicen la verdad”.
Tengo esa frase escrita en la pared de mi casa: “En el vino está la verdad”. Era una frase de mi abuelo. “Los únicos que no te mienten son tu madre y el vino”.
.- ¡Qué bueno!
El vino nunca te va a mentir. Puedo decir que soy el mejor enólogo del mundo, hablar de “mis taninos aterciopelados con un envolvente persistente que te recuerda a…”. Puedo enamorar con mi lenguaje, pero es cuando hueles o bebes el vino cuando sabes si llega o no a tus palabras, si va más lejos aún. Cuando el vino es lo que tú dices, es cuando tú trasmites verdad.
Amaren y Luis Cañas, hermanos y competidores
.- Hablemos de tus vinos de Amaren, donde tú eres su enólogo y el director técnico. ¿Qué verdades ncuentan tus vinos
Yo busqué frases de mi abuelo. “Las uvas de aquí arriba en Samaniego tienen nervio y tensión”. Aunque la gente no lo crea, Amaren y Luis Cañas somos hermanos y, en cierta manera, también competidores.
Cuando empecé, saqué el crianza. Teníamos reservas, y no teníamos apenas genéricos. Todo el mundo cuando venía aquí, nada más entrar por la puerta nos preguntaba “¿en qué se diferencia vuestro crianza del crianza de Luis Cañas?”. Jo, no me ha dado tiempo a enseñarte el viñedo, ni a catar los vinos, y…
.- El ser humano tiene la tendencia a comparar.
“¿Por qué si el Luis Cañas vale 18 euros, voy a pagar por el tuyo 21?” Era una lucha incansable. Decidí hacer un selección de viñedos y quité la precinta del crianza. “Viñedos autóctonos de Samaniego”.
El 85% de Samaniego es el Selección. Certifiqué los viñedos en el vino base de 45 años, clones que con respecto a los de Villabuena había una o dos semanas de diferencia en la maduración, con más nervio y más tensión. Con Garnacha de aquí arriba, no de Baños ni de Leza, una Garnacha que me recordaba al este de Francia, esa pimienta, esa licorosidad del bombón Mon Cheri.
La manera de diferenciarse de Luis Cañas
.- ¿Cómo lo acogió el mercado?
Me sacaron de todas la barras, porque me subí por encima del crianza de Luis Cañas. Pasé años muy malos. Pero hoy lo tengo posicionado. Nadie me compara con el Luis Cañas. Fue muy arriesgado, sufrí muchísimo. En Llodio, en Bilbao… me expulsaron de las barras.
.- Era el precio, y qué más era…
Yo pagaba más por el kilo de uva. La elaboración era también más costosa. Todo era más, con mayor identificación. Pude haberlo sacado como un vino de pueblo, pero pensé que antes que mi pueblo tenía que defender la Rioja Alavesa. Luego saqué el primer Regollar, empecé con los vinos singulares, que luego me salí de esos vinos, no de Viñedos Singulares.
Hoy es el día que solo tengo una precinta de reserva. Y todo lo demás es genérico, donde lo que explico es la finca y el pueblo. No la elaboración, sino el viñedo, la altura, los suelos, la forma de “cocinar” para describir de mejor forma lo que nos rodea.
.- Encontraste la manera de diferenciarte de Luis Cañas.
Eso la gente no lo ve. “Ah, el grupo Luis Cañas”. No, nada de eso. Hay que creer en lo que haces y no rendirse a pesar de sufrir muchísimo.
«La calle es muy dura»
.– ¿Cuántos años de sufrimiento y desierto para llegar a ver la luz?
Aún sigo en el desierto, Julio. Hoy es el día que en Amaren nos defendemos. Lo dejo todo aquí. Que puedo comprar un ánfora, la compro.
Formé un equipo de gente joven. Con cuatro personas hago todo. Les he enseñado como si fueran mis hijos. Santi, Iraultza, Rubén y Jon de Labastida. Todos de la Comarca, que alguno lleva ya once años conmigo. Saben hacer de todo. Y elaboran como yo lo hacía con mi abuelo. Lo que se vende, bien, pero tengo la suerte de tener en Luis Cañas una madre que me permite darle mi amor a las cosas. Hacer una marca es muy difícil.
.- ¿Cuántos kilos de uva entran en Amaren?
450.000 kilos, que en botellas elaboro 350.000 botellas. Con Luis Cañas me peleo en la calle, pero en casa comemos juntos en la misma mesa.
.- Jajaja.
¡Ojo, que la calle es muy dura!
.- ¿Qué es Amaren para ti?
Cuando murió mi abuela, en 1995, de las mejores cubas de Luis Cañas sacamos el primer vino de Amaren. Todo el mundo pensaba que era un vino más de Luis Cañas. Llegó el momento en que o le dábamos vida a la abuela, y le dábamos una casa, o era imposible que este proyecto funcionara.
Rodeado de Maestros en campo y bodega
.- Así se abrió Bodegas Amaren en Samaniego
En 2014 vinimos aquí. Esta que viene será la onceava vendimia. Este edificio había sido antes la cooperativa PALESA (Páganos, Leza y Samaniego). Aquí hay historia.
.- Y hoy para ti esto es…
Amaren es todo para mí. Yo vine a la bodega como hizo mi padre en su día, del sector del metal. Yo venía a veranear a Leza o a Villabuena. Empecé por entonces en el campo con Luis Cañas. He tenido la gran suerte de tener maestros como Eduardo Medina, y en bodega a Pedro Amurrio y Fidel Fernández.
No me puedo olvidar de mi abuelo Luis, que me enseñó a catar los granos de uva. Porque mi abuelo sabía catando granos si eran de Elciego, de Lapuebla, de Navaridas. No he conocido a nadie como él.
.- Tu abuelo Luis.
Mi abuelo no sabría hablar de taninos, pero con la nariz que tenía sabía perfectamente de dónde venían las uvas. Yo cataba mucho con él.
«O te ganas la bodega, o la llevará otro»
.- Y está la impronta de padre Juan Luis.
Mi padre me inculcó los valores, algo que se está perdiendo. Mi padre y los compañeros vieron que podía ir poco a poco con este proyecto, y hoy en día lo llevo todo, a la vez que estoy con Fidel en Luis Cañas, y también con Álvaro en Bodegas Cair.
No por ser el hijo de Juan Luis tengo este puesto. Me lo dijo mi aita desde el principio: “O te lo ganas, o lo llevará otro”. Hay que ser humilde. Tengo a mi cuñado que es el gerente porque conoce bien los números, llevándome por ese camino difícil de la burocracia.
.- Podrías escribir un libro.
Jajaja, con todas y cada una de las vendimias.
.- Tú hiciste maestría industrial.
Y trabajé en la multinacional francesa Giroa, arreglando calderas. Más tarde en Maruxa montando puertas automáticas por todo el norte. Luego trabajé seis años para los hermanos Garay de Mondragón, arreglando máquinas y cortando acero.
.- Parecía que te estabas alejando de las viñas.
Me alejé mucho de la viña por lo que vi sufrir a mi ama y a mi aita, y en parte a mi abuelo.
«Amaren es mi niño pequeño»
.- Hasta que…
Con 26 años, en la crisis del 2008, me ofrecieron trabajar en forjados y prensados. Fue cuando mi aita me dijo “O ahora o nunca”. “O yo empiezo a pensar de otra manera”. Le entiendo muy bien. “Si no van a venir mis hijos aquí, lucharé por todo esto de otra manera”.
.- Así que te viniste al campo.
Me vine aquí cobrando menos que lo que yo ganaba. Empecé a estudiar por la noche Enología, Viticultura, y Administración de Empresas. Así empecé a crecer y amar esto.
.- Hoy Amaren es…
Es mi niño pequeño. Amo Luis Cañas, pero a Amaren lo estoy viendo cómo crece. Es algo más sentimental.
.- Tienes 37 años, y sabes bien que una de las preocupaciones del mundo del vino es que los jóvenes no se incorporan como antes…
En parte es culpa nuestra. Muchos de ellos han visto que el vino ha sido clasista. Pareciera que o lo bebe alguien que tiene dinero o no lo bebe. Hay que hacer vinos ricos, y hay que ganar lo que hay que ganar, porque si no diriges el sector hacia personas que no son jóvenes.
Si además de esto te toca probar por primera vez un vino que es malo de solemnidad en la barra de un bar, pues no vuelves a probarlo.
Sinergias de productos vascos
El otro día me dieron una lección unos mejicanos. Hasta hace poco sólo había probado como Tequila a José Cuervo. Me parecía agua oxigenada ardiente. Ellos me dijeron que yo nunca había bebido tequila, sacándome unos tequilas formidables, dándome cuenta de todo lo que ignoraba.
.- Estás diciendo que con los vinos puede estar ocurriendo lo mismo
Hay que invertir dinero en los jóvenes, llevándoles a las bodegas para que caten vinos ricos. Siempre habrá vinos que cuesten más, porque cuesta más hacerlos, pero hay que hacer vinos para ellos. No puede ser que nos hayan ganado la batalla las bebidas energéticas y la cerveza.
.- El otro día me hablaste de “la cultura de todo lo nuestro”.
Nunca he entendido por qué no creamos en Euskadi una sinergia de valoración mutua entre todo lo nuestro, queso, antxoas, rodaballo, txakoli, chorizo, cervezas artesanas.
O de nuestro aceite Arróniz, con los magníficos olivos centenarios que tenemos en Rioja Alavesa. Cuando entra alguien en mi bodega lo primero es ponerle nuestro blanco con antxoas de Bermeo. O almendras de Rioja Alavesa. Patatas de Álava. Y así.
«Moriré luchando, eso lo tengo claro»
.- ¿Van a sobrar bodegas con la crisis global del vino?
Prefiero pensar que no. De hecho pienso que sobran uvas. Habrá que pensar cuáles son las uvas que debemos defender.
.- ¿Estamos a las puertas de una crisis vitícola sin precedentes?
Creo que ha llegado el momento de pensar, juntarnos y tomar decisiones. El momento de no dejar de pensar. Soy una de esas personas que le gusta afrontar los problemas, pero sin desprestigiar a tu pueblo, ni a los agricultores. Vamos a hacer que todo esto sea bonito entre todos, y que funcione
.- Te alejaste de la viña porque no querías sufrir, pero hoy eres inasequible al desaliento.
Moriré luchando, Julio, eso lo tengo claro. No me voy a rendir. Pediré ayuda a quien sea, porque el que no la pide es tonto, pero hay que luchar hasta que te quiten el bombín de la puerta. Tengo muchas familias detrás, y a muchos compañeros que quiero y estimo. Entre todos vamos a hacer que esto siga para adelante.
Pero rendir no te puedes rendir. Eso nunca.
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La fuerza, el sentimiento, la educación del trabajo, junto a unos criterios claros de hacia dónde hay que ir, la búsqueda de la diferenciación, la unión, y siempre pensando que la calidad es la salida mejor para esta crisis son las sensaciones positivas que he sacado de la entrevista a Jon.
Ánimo a todos «los Jon», jóvenes vitivinicultores de Rioja Alavesa !!!!!
Gracias, Fernando
Esto es llamar al pan, pan. Y al vino, vino. Me gusta que se hable con esa verdad, sin pelos en la lengua.
Gracias, Begoña
Me gusta lo que dice Martínez-Bujanda, sus admiraciones lo dejan claro. Y estoy de acuerdo con la lectora Begoña Tudela. Yo añadiría que en la crisis del sector en la que estamos inmersos aún no hemos tocado fondo. Así que Eutsi goiari!!
Sepamos entre todas y todos buscar la suerte, pensando y repensando!! La vamos a necesitar
Gracias, Juan
Qué gozada, Jon Cañas. Qué claro lo tienes. Se te agradece, y mucho, la positividad que emanas. Menos mal que tú no eres de los que dice y repite que «todo es una mierda». Te felicito a ti, a tus padres y a tus maravillosos abuelos. Zorionak!
Eskerrik asko, Clara
Cuánto sentimiento, pasión y humildad. Qué valores. Bravo
Gracias, Javier
Resaltaría los valores que porta Jon Cañas. Algo que a mí también me transmitieron mis mayores. Yo lo llamo sentido común en el centro de la vida
Gracias, Chelo
He sido testigo de la evolución de Jon en la bodega desde que entró en el departamento de campo hasta hoy, ha sido un progreso alucinante, Jon ha interiorizado a la perfección los valores de su padre, con gente como Jon Cañas el futuro de la cCmarca esta garantizado.
Eskerrik asko, Jon.
Eskerrik asko, Pedro Pablo
Debemos cambiar todos. Sin echarnos las culpas unos a otros, bodegueros, viticultores, instituciones. El problema es de todos y entre todos hay que solucionarlo. Entre los que llevan la uva a pesar y los que la pesan, entre los que venden y los que compran. Justicia solidaria.
Jon, te voy a dar un consejo de viejo: Tu padre es un referente para ti, pero, ¡ojo!, los referentes no son para imitarlos, sino para superarlos. Como hizo tu padre con tu abuelo.
Hablas de saber hacer las cosas bien, de diferenciarse por la calidad, de espíritu creativo, de responsabilidad compartida. ¡Grandes propósitos!
¡Ojalá que los bodegueros sepan mirar a la calle para que vean el sufrimiento, como dices tú! Con esa mentalidad hay que enfrentarse al cambio.
Jon, gracias por tus palabras que nos ayudan a cambiar, pero REFLEXIONANDO Y TRABAJANDO.
Gracias, Antonio
Cierto, muy cierto.
Todo está complicado y difícil, pero Jon abre la esperanza de seguir luchando cuando sabe que está convencido de ello, aunque se sufra mucho.
Aprecio mucho ese reconocimiento y respeto por otros
Productores, que lejos de ser competencia, son los compañeros de viaje hacia esa excelencia necesaria.
Especialmente necesaria la llamada al apoyo a los productores (sobre todo en el precio) con la solicitud de una acción común (incluidas instituciones y DOCa) para poder situarse en un lugar especial en el mundo el vino.
Muy bien Jon, necesaria y profunda toda tu reflexión. Suerte
Gracias, Alberto