“Para todos los sanitarios y todas las personas que estén al servicio de los demás”. Pedro le canta a San Roque (que significa “fuerte como una roca”) en la creencia de que “el santo contra la peste protector / nos librará a los humanos de este virus tan traidor”.
Le canta Pedro Riofrancos al santo que erigieron sus antepasados en Elciego, donde la ermita situada en una de las colinas cercanas al pueblo, está dedicada hoy a San Roque y San Gregorio.
En el recuerdo y la Historia está la peste que asoló Rioja Alavesa “en cuatro golpes distintos, a lo largo de 300 años”, arruinando pueblos enteros, asolando cosechas, entonces mayoritariamente de cereal.
Un decreto del Papa pidió que se construyeran ermitas a San Roque, en la creencia de que el santo traería la curación, entonces contra la peste, y hoy contra esta otra peste del Covid-19, o coronavirus que afecta al mundo entero.
Peregrinando desde Montpelier a Roma, se desató una epidemia de peste que provocó una gran mortandad en toda Europa. Roque recorrió Italia y se dedicó a curar y atender a todos los enfermos de la peste.
Cuidó enfermos en Roma, Rímini, Novara, Cesena… La tradición popular decía que curaba a muchos enfermos con solo hacer sobre ellos la señal de la cruz. A los que morían, él mismo les hacía la sepultura, pues nadie más se atrevía a acercarse a los cadáveres por el miedo a contagiarse de la peste.
“Eres San Roque bendito, junto con los sanitarios y todas las personas al servicio de los demás”, es el homenaje de Pedro Riofrancos a la tradición, por un lado, y a los nuevos «santos» del siglo XXI.
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Muchas gracias, jotero de Zieko. Tu canto es esperanza. Gracias
Muchas gracias, Gloria Martin, por decir lo que otros pensamos. Saludos
Gracias Pedro, es un lujo escucharte.
Muchas gracias, Piti Alfaro. Un cordial abrazo