JUANMA Lavín el 31 de marzo de 2019… un año muy diferente a este inesperado 2020.
Bien pudiera ser ésta la duodécima (XII) entrevista de las realizadas por el Blog “para volver a la nueva normalidad”. De hecho, ahora sabemos mejor que nunca, ahora vemos en nuestro acontecer diario lo que supone, lo que es, en parte, la “nueva normalidad”.
SEPARADOS por la pandemia en estos meses, la familia se ha vuelto a reunir. (Archivo).
RUBÉN y Juanma Lavín con su madre Luchy Santamaría en Villa-Lucía. (Archivo del Blog).
Los hermanos Lavín Santamaría dirigen una de las empresas de hostelería y turismo de Euskadi más premiadas del último año. Sin el virus, sin el confinamiento, sin el cierre de su local por la pandemia, este 2020 hubiera sido para Villa-Lucía el año del despegue económico.
Hay períodos en la vida que son un golpe del destino, y que, sin embargo, luego resulta que son algo más, mucho más, pues vienen con una particular lección bajo el brazo.
EL color del suelo quiere ser una simulación de un tiempo insólito de pandemia.
El COVID-19 ha sido un virus invisible, pero su zarpazo ha sido colosal. Tal es así, que Juanma Lavín Santamaría habla de un período doloroso… que, a la vez, le sirve para reflexionar con hondura. Para dejar al final de la entrevista una postdata personal, a modo de dedicatoria.
.- ¿Es un reto la celebración del Curso de Verano de esta semana?
Un gran reto ya que es un tema complicado y va a ser como un pistoletazo de salida para Villa-Lucía tras este período infernal que hemos sufrido. Creo que es el primer acto de este tipo que se hace en Euskadi post COVID-19 y se han puesto en él muchas ilusiones y grandes expectativas.
.- Seguro que todo sale bien, Juanma.
CARTEL del Curso de Verano que se celebrará el próximo 2 de julio en Laguardia.
Va a ser una prueba piloto que confío salga bien. Lo estamos definiendo con un plan de contingencia especial para esta apertura. Dicho plan está certificado por unos laboratorios bromatológicos gasteiztarras (ARALAB).
Se han instalado en las diferentes salas unos sistemas bacteriológicos a base de Ultravioletas UV-C que se activan durante la noche cuando no hay personas y desinfectan el ambiente. Con esto vamos a empezar.
También se están tomando muestras del aire de las diferentes salas de Villa-Lucía para ver los niveles bacteriológicos con ventilación normal y forzada… Bueno, estamos preparando también el regreso y la apertura al público, que será el día 3 de julio a la noche.
JUANMA Lavín en un momento de la entrevista mantenida hoy con el Blog.
.- Has dicho “REGRESO”, y se te ha iluminado la cara.
Nosotros lo hemos llamado “Volvemos”, en alusión a todo ese montón de familias que forman parte fundamental de la empresa. Volvemos con ganas, y volvemos con incertidumbre porque hay un riesgo; lo hay, así que lo hacemos con prudencia para que no haya rebrotes. No tanto por el personal nuestro, que está todo el mundo muy concienciado.
.- ¿Cómo han sido estos tres meses y medio de pandemia?
JOSÉ Luis, su apoyo personal y profesional en este pandemia ha sido fundamental.
Duros. Muy duros. Hemos tenido mucha relación con el personal y con nuestros compañeros de trabajo. A nivel familiar ha sido muy duro, porque yo he estado aquí en Laguardia, mientras mi familia estaba en Vitoria. También mis padres estaban en Vitoria. A sus 91 y a sus 88 años eso les ha afectado. Luego mi hermano ha estado aquí conmigo.
Con él me he preguntado “¿cómo nos podemos reinventar?”
JUANMA y Rubén junto a un tractor de los años 50, que Rubén ha rehabilitado.
.- ¿Cómo habéis respondido a esa pregunta? ¿Cómo reinventarse?
Mi hermano Rubén se puso a restaurar maquinaria antigua y unos bocoyes y grandes barricas que tenemos. Los compramos en su día a unos almacenes de vino en Bilbao, de cuando las inundaciones de 1983. Con aquello hicimos el techo del asador, y ahora mi hermano ha restaurado aquellas barricas, a las que ha puesto grifos, y se le ha sacado todo lo que tenía de bronce y cobre.
RUBÉN dándole los últimos toques a las barricas restauradas.
.- Y habéis acomodado los espacios a la nueva situación post-COVID.
Hemos definido mucho mejor lo que será la terraza, porque en esta nueva situación tendremos que estar más al aire libre, montando un toldo de 18×5 metros que hemos traído de Suiza, además de varias sombrillas de 5,5 x 5,5 metros, para que la gente esté a gusto, y con seguridad.
GRAN toldo de 18 x 5 metros de fabricación suiza.
.- Veo que no habéis estado parados mano sobre mano.
También hemos preparado con el crítico gastronómico Pepe Barrena un libro de recetas de mi madre con vinos de Rioja Alavesa. Son recetas que ella tenía escritas en unos apuntes de 1957-58 cuando iba a clases de cocina… Lo editaremos a lo largo del mes de julio, un regalo que le haremos a mi madre, que aún no sabe nada. Y…
.- No me digas que aún habéis hecho más cosas…
Acabamos de montar una exposición en el exterior de Villa-Lucía para mostrar las máquinas antiguas restauradas, entre las que está un tractor de los años 50, que se ha restaurado entero.
ESTOS días montando las sombrillas para dar mayor seguridad a sus clientes.
.-¿De qué manera os ha herido estos tres meses y medio de parón?
Este 2020 era un año que se preveía muy bueno para la empresa, porque después de la crisis anterior estaban siendo unos años de renovación, pero muy duros. En 2020 esperábamos recoger todo lo sembrado, y ver la luz. La pandemia nos ha tocado muchísimo desde un punto de vista financiero. Y moralmente también. Pero te tienes que levantar como sea, pelear con los bancos, recurrir a nueva financiación. Pero lo que sí ha habido es mucha unión dentro de la casa, dentro de la empresa.
EL DÍA 3 volverán las ‘cenas musicales’, con las oportunas medidas, al Villa-Lucía.
Al principio todos sufrimos un shock, pero pronto te das cuenta que estás enclavado en un destino que se llama Rioja Alavesa, en un entorno a lo largo y ancho de la Sierra y hasta el Ebro, que es espectacular. Con muy buenos recursos naturales. Con gente muy comprometida. Todos somos importantes.
.- Que si uno va solo no llega lejos…
EXPO de maquinaria en la que han ocupado parte del tiempo.
Al final nos hemos dado cuenta de que uno solo aquí no hace nada. Y que si no hay un entorno esto no vale nada. Con la que ha caído te preguntas “¿qué narices vas a hacer tú aquí si no es en connivencia con muchos otros?” Con alojamientos, con bodegas, con los propios viticultores…
Nosotros dependemos mucho del mundo del vino, que es la economía de la Comarca. Si la Comarca se hunde, nosotros nos hundimos con ella; y si prospera, nosotros vamos a prosperar. Los de la Comarca son nuestros grandes embajadores porque consideran que nuestro proyecto es parte de su proyecto.
RUBÉN y Juanma con una barrica para tratamientos de la primera mitad del XX.
.- ¿El palo del coronavirus ha sido para la Comarca entera?
Cuando todos nos vemos mal, todos nos ponemos en el pellejo de los demás. Cuando ves una carta de una bodega que dice que no comprará uva, lo sientes como si no te fuesen a comprar a ti. Cuando hablas con bodegueros y te dicen que justo están vendiendo on line cuatro cajas de vino, te duele, porque tú vendes su vino, y, a la vez, son tus clientes.
Esta es una zona pequeñita en la que es importante que antes que clientes veas a gente amiga.
.- Vas a cumplir pronto 57 años… ¿Se podría decir que vuelves a la actividad empresarial con la ilusión de un muchacho?
Sinceramente llevo muchas noches mal durmiendo y muy nervioso. No sé si es bueno reconocerlo, pero es así. Me despierto y le doy mil vueltas a todo: “Jo, a ver si no fallamos”, me digo. Este 1 de julio se incorpora una parte importante del equipo, que llegaremos a ser 40 personas.
.- Vuelves con una trayectoria profesional detrás, con los muchos premios que os han dado (últimamente estabais de racha)…
Vuelvo con la energía de un actor que por fin levanta el telón de la Obra. Nosotros “debutamos el día 2 de julio”. Esta noche estaré nervioso, mañana también… No son nervios de miedo, sino de responsabilidad, de no querer fallar, y si se falla tenemos que rectificar muy rápido. Nos hemos estado preparando para atender muy bien a la gente, para darlo todo.
JUANMA Lavín recogiendo un premio en Burdeos en noviembre de 2019.
.- ¿Crees que vuelve una Comarca mejor?
Sin duda que sí. Y si no fuéramos una Comarca mejor, estaríamos desaprovechando una desgraciada oportunidad que hemos sufrido.
.- Al principio la has definido como un “período infernal”.
Para mí lo ha sido. Lo peor de esta vida es la desinformación y la incertidumbre, cuando no sabes que va a pasar. Cuando a la mañana es A, a la tarde es B y a la noche es C. Eso es infernal cuando tienes a gala que cuentas con trabajadores que llevan con nosotros 25 o 27 años. Y algunos ya se han jubilado en esta empresa.
.- Te hago la pregunta que se formula este año el Curso de Verano de Laguardia: ¿Y ahora qué?
Ahora nos toca trabajar a destajo, sin mirar a los lados. Trabajar como mulos. Pero de nada servirá si no hay una mutua colaboración, como aquellos trabajos de apoyo que en el pasado existieron aquí en comandita: “yo te ayudo a labrar tus viñas, y tú me ayudas a mí a desnietar”.
Rioja Alavesa es irrepetible, y no es porque seamos de aquí. Con mucho dinero puedes comprar arquitectos, edificios, y puedes ponerlos donde tú quieras, como si fuera un parque temático. Pero lo que no podrás hacer es tener una red de bodegas familiares, de viticultores que ha ido heredando y trabajando viñas de padres a hijos durante generaciones y generaciones.
VOLVER, amanecer, la oportunidad de seguir haciéndolo mejor cada día
.- Se entiende muy bien lo que quieres decir, Juanma.
Bien. Pues “esto” no se puede perder. Y en “esto” tenemos que estar todos. Tenemos que ser generosos y los mejores comerciales de nuestros vecinos. Si Rioja Alavesa no aprende a trabajar conjuntamente, a vender el vino del vecino, y la viticultura del vecino, entonces estaremos perdidos.
¿Y ahora qué? Pues ahora a cooperar y a competir. «Coopetir» es la única manera de intentar sacar la cabeza en la era de la globalización.
.- ¿Cómo se encuentra el “paciente” Rioja Alavesa tras la pandemia de la Covid?
Rioja Alavesa podría morir de éxito individual, quiero decir que Rioja Alavesa tiene que vivir del éxito colectivo. Nos toca trabajar conjuntamente, nos toca ceder, y nos toca ser generosos con nuestros vecinos.
CON su hermano Rubén, presente en su anotación final, cuando la entrevista había terminado.
P.D.: “Julio, no te he dicho que este tiempo de confinamiento en Laguardia ha sido también el tiempo de las aves, sus cánticos y trinos, sus nidos por doquier,… una garza comiéndose más de 500 peces del estanque,… Paz y vida al unísono.
“No me quiero olvidar de personas como César Sáenz de Samaniego por su apoyo personal y profesional, ni de José Luis Sandoya por lo mismo, de las largas conversaciones con amig@s, colegas de profesión, familiares,… Y la compañía ausente de mi esposa Amaia, ni de los grandes momentos con mi hermano Rubén, con largos y prolongados silencios muy significativos y sentidos,…”
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Juanma y Rubén eran muy grandes antes de la pandemia, y aún lo serán más después de ella, lo tengo claro, la gente responderá a todos los nuevos proyectos que seguro habéis maquinado en estos meses. No os deseo suerte porque sé que os va a sobrar. Abrazos.
Muchas gracias, Joseba Fernández, presidente de la Cuadrilla de Rioja Alavesa. Un cordial abrazo.
Juanma Lavín canta a Rioja Alavesa desde la empatía. «Cuando ves una carta de una bodega que dice que no comprará uva, lo sientes como si no te fuesen a comprar a ti… Esta es una zona pequeñita en la que es importante que antes que clientes veas a gente amiga». Una hermosa manera de hacer Comarca. Su esfuerzo y el de tantos otros, sus ganas, ese «no queremos fallar» es una inspiración. Aurrera!
Eskerrik asko, Arene Amezaga. Un cordial abrazo.
Me gusta pensar con el hostelero entrevistado que vuelve, tras el coronavirus, una Comarca mejor, una Euskadi mejor. Que esta pandemia nos ha hecho mejores. Ojalá sea así!
Muchas gracias, Jon Artetxe. Un cordial abrazo.
Las palabras de Juanma son una carga de profundidad. «Rioja Alavesa podría morir de éxito individual -advierte-, quiero decir que Rioja Alavesa tiene que vivir del éxito colectivo. Nos toca trabajar conjuntamente, nos toca ceder, y nos toca ser generosos con nuestros vecinos».
Esa llamada a la unidad permanente que hacen muchos agentes de Rioja Alavesa es la que les hace grandes en una «zona pequeñita», como él dice. He bebido algunos de sus vinos, y todos son magníficos. Tan buenas ideas, tan generosas y solidarias, son de las que hacen auténticos vinazos.
Muchas gracias, Sara Macias. Saludos cordiales.
Una familia que lucha cada día por proyectar una Rioja Alavesa mejor; con un concepto claro de que la suma de todos es la mejor fórmula para salir a flote. Cooperar y competir… «coopetir». Un orgullo de ser vuestros coopetidores y amigos!! Abrazo!!
Muchas gracias, José Manuel Calleja. Saludos cordiales.
No tengo palabras para comentar lo que siento por Juanma… Te quiero, tío… y lo sabes, jajajajjjaja…
Muchas gracias, Jose Miguel Rodriguez. Un cordial abrazo.
Una gran suerte ? tener este paraíso cerca de casa, un lugar de esparcimiento. Toda Rioja va tener k pelear duro ya se avecina times duro y con el covid pues ni te cuento, ánimo y seguimos viéndonos, siempre viva Villa Lucía
Muchas gracias, Carlos García. Saludos!
Muchísimas gracias por las muestras de cariño recibidas y por vuestros comentarios. La verdad es que nos abruman y ruborizan por un lado y nos animan a seguir trabajando por esta magnífica Comarca, coopitiendo con nuestros vecinos y sobre todo aportando nuestro granito de arena y todo lo que nuestros progenitores Luchy y Manolo nos han enseñado: amor por nuestra tierra, sacrificio y trabajo sin descanso por ella
… y no dudar en hacer el bien y respetar al prójimo. Con todo nuestro cariño y nuestros mejores deseos, recibid un cordial y afectuoso saludo de Rubén y Juanma
Muchas gracias, Juanma Lavín. Un cordial y afectuoso saludo para toda vuestra familia.