Es probable que no seas la misma persona cuando termines de leer esta entrevista, porque gracias a ella sabrás que los seres prehistóricos enterraron en ocasiones a sus muertos sobre un lecho de flores.
O que viñas y olivos se asentaron miles de años después sobre poblados neolíticos que nunca fueron descubiertos, y que sin embargo estaban ahí formando parte de nuestro rico patrimonio.
Flores debajo. Y un bello sortilegio de vides sobre la Prehistoria de la vida humana.
Todo girará en tu cabeza. De repente te sentirás tocado por el paso del tiempo. Aquellos pioneros de hace casi 7000 años remontaron su vida a cuestas, desde el Mediterráneo, en un discurrir sereno por las orillas del río Ebro, acampando en sus riberas, construyendo sus poblados andantes, pariendo a las siguientes generaciones.
Con ellos llevaban sus ovejas, la cerámica cardial, los instrumentos fabricados en sílex, sus flechas, su fuego… Mientras caminaban, cazaban, dirigiéndose hacia el norte en primavera y verano, buscando en invierno cuevas o abrigos…
Esto que escribo es parte de una apasionante conversación con el catedrático de Prehistoria, Javier Fernández Eraso, con quien la semana pasada me cité en Elvillar.
Acogidos en el Ayuntamiento por su alcalde, Enrique Pérez Mazo, y la concejala de Cultura, Joana del Hoyo, me siento con el profesor Eraso para hablar del libro “La prehistoria en Rioja Alavesa”, publicado este mes de abril por la UPV-EHU.
Javier ha realizado un trabajo formidable con su colega el guipuzcoano Josean Mujika Alustiza. Ambos cuentan con dos currículum impresionantes de casi cien páginas cada uno. Con más de 350 publicaciones en grandes revistas del mundo.
El navarro Fernández Eraso ha excavado personalmente en 18 yacimientos de todo tipo, habiendo dirigido un total 45 campañas de excavación. En su libro, escrito por siete investigadores, se reconoce la excepcionalidad prehistórica de Rioja Alavesa.
Tenía 31 años cuando llegó por primera vez a Kripan, rodeado ya de jóvenes universitarios de entre 18 y 20 años. Allí les llamaron “Los hueseros”.
Es verdad que recuperaron e inventariaron huesos, cerámicas, armas de caza, pólenes, piedras… Desde un principio Javier vio en los dólmenes de Rioja Alavesa los mausoleos que fueron, tratando las piedras prehistóricas con el respeto y la consideración que merecen.
Tal es el interés que despertarán sus palabras en mí, que al día siguiente seguiré conversando con él por teléfono. Entonces -empiezo por el final- Javier detallará el largo viaje de aquellos primeros pobladores que vinieron desde el Mediterráneo hasta Rioja Alavesa.
“Podemos pensar que en su viaje de hace más de 6720 años aquellos humanos se irían asentando en poblados, quemando para ello partes del bosque para cultivar la tierra. Cuando la tierra se esquilmaba, cambiaban el poblado de sitio. De igual manera, cuando el poblado crecía mucho en personas, algunas se desplazaban para fundar otro poblado”.
Rioja Alavesa no fue la estación final de aquellos humanos del Neolítico. Algunos se asentaron y se quedaron para siempre entre la Sierra y el Río, pero otros siguieron hacia el norte, remontando las cabeceras de los ríos, hasta llegar a la costa, junto al mar Cantábrico.
Algunos volverían después hasta Rioja Alavesa. De hecho se han encontrado sílex de los flysch provenientes de la costa cantábrica. En la Cueva de Arenaza, en San Pedro de Galdames (Bizkaia), también se ha encontrado cerámica impresa de tipo cardial, posiblemente del Mediterráneo, y hay sílex que proceden de la zona del Ebro. Están las certezas… pero también las incertidumbres.
Hablamos de Prehistoria. Del paso del tiempo. De cientos de generaciones viviendo una detrás de otra. De sesenta y siete siglos en el devenir humano…
En esta conversación palpitan preguntas imposibles de contestar. El silencio solemne es a veces la respuesta que sobrevuela el misterio de un pasado remoto, cuando al territorio hoy conocido como Rioja Alavesa llegaron aquellos primeros pobladores procedentes del Mediterráneo, caminando río arriba con sus rebaños por la ribera del Ebro.
Al leer este artículo, quizá te pongas en el lugar de aquellos pastores. Seres humanos que un día muy lejano encontraron por primera vez este paraíso, un paraíso distinto, sin viñas, sin olivos, sin villas ni bodegas, pero paraíso al fin y al cabo, habitado por su enorme majestad el bosque, con un gran potencial, un lugar de leyenda entre la Sierra y el Río.
El profesor Fernández Eraso llevó a cabo su primer sondeo arqueológico en 1984, en Kripan, siendo su última excavación en 2016, en Torrentejo, alrededor de la ermita de Santa Lucía, “donde aparecieron primero unas tumbas medievales, y luego al profundizar nos encontramos con cerámica campaniforme y sílex”…
A esta última excavación de Torrentejo le invitó el catedrático de Arqueología, Juan Antonio Quirós -que se dedica a la Edad Media-, pues encontró en sus sondeos de excavación unos fragmentos de cerámica campaniforme.
.- ¿Qué sabías en 1984 de Rioja Alavesa?
De Rioja Alavesa no sabía nada. De hecho, cuando vine por primera vez, pregunté “¿cómo se va a Kripan?”. Lo que sí sabía era que había varios dólmenes, y conocía los yacimientos emblemáticos, como Los Husos.
.- De lo tuyo sí sabías, por supuesto.
Sí. Pero no había estado hasta entonces en Rioja Alavesa. En 1978 me había trasladado desde Pamplona a Vitoria, pues soy uno de los cinco profesores que vino a poner en marcha lo que se llamaba Facultad de Filosofía y Letras en la UPV-EHU, encargándome de Prehistoria, que hoy se llama Facultad de Letras, de la que durante un tiempo fui Decano (1990-1996).
.- ¿Sobre qué versó tu tesis doctoral?
La hice sobre el Tardiglaciar, que son los últimos momentos de la última gran glaciación. Hay tres momentos muy fríos, y dos momentos más templados. Fue entonces cuando se producen todas las culturas de transición del Palolítico Superior. Mi tesis era el final del Magdaleniense, entre 11000 y 12000 años desde la actualidad.
.- ¿Qué nos dices de este libro que acaba de ver la luz “La Prehistoria en Rioja Alavesa”, esta Guía para su conocimiento y visita.
De Rioja Alavesa no se sabe del todo que dentro del paisaje vitícola hay un riquísimo patrimonio arqueológico, de tal manera que preguntas a nivel global y la gente te puede hablar de “La Hoya”, que ha tenido mucha resonancia, y del Dolmen de la Chabola de la Hechicera, que es el icono que aparece en todas partes.
.- Por cierto, llama la atención que no aparezca en la portada del libro la imagen del dolmen de La Chabola de la Hechicera…
Por una razón. Hace dos años el Gobierno Vasco publicó un librito de Armando Llanos que hablaba del patrimonio de Rioja Alavesa, que tiene ya de portada al dolmen de la Chabola, así que optamos por el Dolmen de la Huesera, con una fotografía que hicimos cuando fue excavado por Josean Mujika y por mí.
.- Lo que hacéis con el libro es dar a conocer nuestro patrimonio.
Porque es un patrimonio muy rico, no sólo en cuanto a dólmenes, sino en cuanto a poblados al aire libre, y también los abrigos rocosos, que están muy maltratados. Se trata de que la gente sepa qué tiene. Y lo que tiene es algo muy importante. Lo más antiguo que hay del Neolítico en el País Vasco se encuentra aquí.
.- ¿Qué ha aparecido hasta ahora en las distintas excavaciones?
Cerámicas que proceden del Mediterráneo, que están decoradas con impresiones de cochas de berberechos. Aquí ha aparecido una especie animal nueva, que no es oveja ni cabra, sino un híbrido de los dos, lo que no ha aparecido en ningún otro lugar del mundo. Y hay más cosas que se irán publicando poco a poco, muy llamativas.
.- ¿Qué está suponiendo ese desconocimiento, Javier?
Claramente lo digo: que las cosas no se cuiden como se deberían cuidar. El patrimonio que existe en esta zona puede ser comparable con el de Les-Eyzies-de-Tayac-Sireuil, en la Dordoña francesa, que tiene los mejores yacimientos de finales del Paleolítico.
Si tú vas hoy a esa zona, te puedes pasar una semana visitando museos, centros de interpretación, arte rupestre, abrigos… Algo que aquí también se podría hacer con los Dólmenes, los poblados, los abrigos rocosos…
.- Con la Guía pretendéis que la gente sepa llegar a los diferentes lugares para visitar el patrimonio de Rioja Alavesa.
Hace unos años estuve dando una charla en Navaridas, hablando de la prehistoria en Rioja Alavesa, los yacimientos… Una de las preguntas que me hicieron fue “¿Dónde está escrito cómo se puede llegar?”. Entonces me di cuenta que quitando los dólmenes, que estaban indicados, aunque no todos, de lo demás no se sabe nada. Así que con el libro respondemos ahora aquella pregunta de Navaridas.
.- En el libro decís que este territorio es uno de los mejores datados de Europa. Sin embargo… a fecha de hoy, a nivel general, ¿sabemos más de aquellos pobladores de hace 5000-6000 años que lo que desconocemos, o al revés?
Es una pregunta difícil de responder por una sencilla razón, porque conocemos mucho, pero no todo. Y de ese “no todo”, desconocemos el tamaño que tiene. Lo que sí te puedo decir es que lo que desconocemos son los asentamientos al aire libre, los poblados. De hecho, aquí aún no se han descubierto los poblados.
.- Esos poblados estuvieron sin duda ¡por aquí!
A veces, hablando con gente de Rioja Alavesa te cuentan cuando desfondaron una finca, y lo que allí apareció. Cuando te describen lo que encontraron, te están describiendo las plantas circulares de las cabañas neolíticas.
Todo eso se ha hecho sin control arqueológico alguno, cuando aún no había una Ley de Conservación de Patrimonio, o porque en la remoción de tierras y labores agrícolas no están sujetos a una revisión arqueológica.
.- Entonces aquellos vestigios se han perdido para siempre.
Cuando se hizo el gaseoducto en Rioja Alavesa sí hubo un control arqueológico. Nos encontramos que estaban en una finca haciendo la zanja para meter el gas, con un arqueólogo a pie de obra, mientras que 200 metros más allá, se estaba desfondando una finca para plantar viña, haciéndose aquello sin ningún tipo de control.
.- ¡Qué pena de Patrimonio!
Yendo al abrigo de Los Husos yo he encontrado en montones de tierra tirada donde había fragmentos de hachas pulimentadas, que luego entregué al museo… No se sabe qué había ahí.
.- Entonces… ¿ya no existen más poblados neolíticos?
Puede que sí, porque aquellos no situaban los poblados en cualquier sitio. Aún quedan zonas en las que pudieron establecerse, zonas elevadas, cerca de riachuelos, o de manantiales, ligeramente elevadas para que su poblado no se inundara, en terreno siempre seco. Hay un conjunto de superficie que aún puede dar lugar a la aparición de algún asentamiento más.
.- Sabemos que los primeros pobladores neolíticos, los pioneros de hace 6720 años, fueron pastores que llegaron a estas tierras remontando el curso del río Ebro.
Así es.
.- Lo que no sabemos es en qué creían. Si el Sol o la Luna eran sus “dioses”. No sabemos si creían que al morir su espíritu habitaría otro lugar…
No sabemos, pero hay una cosa que es consustancial a la naturaleza humana. En Prehistoria hemos encontrado enterramientos desde el Paleolítico inferior… son contados, pero los hay. Porque si tú no crees en nada, te daría igual que el cuerpo se deshaga o se lo coma cualquier animal. Pero cuando cuidas el cadáver, eso indica algo.
.- Por ejemplo.
Hay yacimientos del Paleolítico inferior, y medio, en los que el difunto fue enterrado sobre un lecho de flores, porque la concentración que tiene de polen es muy grande. Hubo enterramientos de neandertales con los individuos bien colocados. Hay enterramientos de cromañones que están recubiertos de ocre rojo. Todo eso sí existe.
.- ¿Y en el Neolítico?
En el Neolítico se enterró al principio a la gente en el interior de los poblados. Después vienen los Dólmenes. Es decir, hay un intento de conservación, lo que nos lleva a pensar que existía en ellos una transcendencia.
.- Sabemos que vivían en poblados rodeados de una empalizada, formados por cabañas de planta circular y que disponían de hoyos en los que almacenar alimentos.
Exacto.
.- Lo que no sabemos es si eran pacíficos o guerreros. No sabemos si se mataban entre ellos por la disputa del territorio o convivían en armonía.
Eso podemos saberlo por las huellas de flechas, o de otras armas, que pueden aparecer de flechas clavadas en huesos. Durante el Neolítico, en principio, los huesos encontrados no parecen que tengan ningún tipo de heridas.
En el Calcolítico sí, hace 4700 años. Hemos encontrado en la zona de Laguardia flechas clavadas en huesos, en vértebras y demás. Al otro lado de la Sierra, en las Yurdinas, también hay huesos donde se clavaron flechas. En otras partes de Europa han aparecido fosas comunes de gente que fue asesinada durante el Neolítico, pero aquí no hemos encontrado eso, de momento
.- En este sentido, ¿qué llama tu atención?
Josean Mujica y yo intuimos que hubo un cambio de población, porque hemos encontrado dos fases: una anterior al campaniforme y otra campaniforme. En Peña Larga encontramos enterramientos en el abrigo anterior al campaniforme y sobre ellos se instala un redil para guardar el ganado.
.- ¿Qué significado tiene? ¿Cómo interpretáis ese dato?
Bueno, tú no metes un redil donde tienes enterrado a tu abuelo o a tu bisabuelo. Pones el redil cuando lo que hay en el lugar no tiene ningún tipo de unión sentimental contigo. Cuando no hay vínculo alguno sí, entonces quemas los huesos y colocas el establo encima. El grupo de Harvard, que hizo todo el estudio de ADN, llegó a dictaminar que hubo un cambio de población.
.- ¿Eso qué te lleva a pensar?
Aquí hubo una invasión de unos determinados pueblos que matan a los hombres y que se quedan con sus mujeres. Ahí sí parece que hubo un cambio de población. Eso tendría sentido, pues de otra manera no le veíamos una explicación posible.
.- Sabemos que practicaban la trasterminancia, que desde la primavera hasta finales del verano llevaban el ganado a la Sierra.
Sí.
.- Lo que no sabemos es si contaban cuentos y leyendas a sus hij@s, ni en qué idioma se expresaban… ¡Es tanto lo que no sabemos!
Claro. Sabemos cosas que pueden tener relación con lo material encontrado. Otras cosas solo las podemos intuir. De su lenguaje no hay nada, pero algún idioma hablarían.
.- Ellas y ellos tendrían sus palabras de amor, de lealtad, sus palabras rituales, sobre su cotidianidad…
Seguramente. Y seguro que contarían cuentos y leyendas. En el País Vasco somos unos grandes contadores de cuentos, explicando siempre las cosas recurriendo a mitos y mitologías, y a grandes personajes de leyenda.
.- ¿Puedes decir algo más concreto?
Sí te puedo decir, Julio, que eso es seguro, que hay determinados lugares que mantienen un carácter sagrado, porque hay enterramientos que se repiten de manera sistemática en el mismo lugar, hasta que en un momento se levanta un Dolmen.
Fíjate si somos amantes de mitos y tradiciones que nos ha pasado muchas veces, a gente de mi profesión, que excavando un dolmen al día siguiente te encuentras ceniza y una porcelana rota… Ha sido alguien que por la tarde, cuando el arqueólogo se ha ido, ha tirado allí las cenizas de algún pariente al interior del dolmen.
.- Si unos guionistas realizaran una serie televisiva de lo que aquí aconteció durante mil años, entre el 6720 y el 5720, ¿cómo llenarían las grandes lagunas de la Prehistoria?
Un serie así, bien hecha, sería bonito… pero no sé si daría para muchos capítulos.
.- ¿Cuáles son tus preguntas, las que no han tenido respuesta hasta ahora?
Buff, muchas. Te llegas a cuestionar muchas cosas. Todo. La gente de la calle quizá no tenga la visión temporal que podemos tener nosotros. Yo he tenido en mis manos piedras talladas por Homo habilis que tienen más de dos millones de años.
.- ¿De qué tiempo son en Álava las piedras talladas más antiguas?
En torno a los 300.000 años, que son las que hay en el pantano de Urrunaga, que es del final del Paleolítico Inferior. Mis preguntas tienen también que ver con las preguntas que tú me estás haciendo. ¿En qué creían aquellos? Todos somos especies distintas. Sabemos que los Homo Sapiens desde el principio somos capaces de transcender. Si transcendemos es porque tenemos una proteína que se llama dopamina, porque si no, no seríamos capaces.
.- ¿Qué sucede con los que tienen poca dopamina?
Es gente que no transciende. Es gente muy fría. Y los que tienen mucha dopamina, lo suyo es un festival. Al final hemos establecido una serie de creencias, pero en relación a lo que es la evolución de la especie humana somos de anteayer. Si nuestra especie actual tiene 40.000 años, qué pensó el Neandertal hace 300.000 años, o qué pensó el Homo habilis con dos millones de años, o…
.- Son muchas las preguntas…
¿Por qué cada una de las especies dura cada vez menos y evoluciona más rápido? Los Homo habilis duraron un millón de años. Sin embargo los Neandertales duran menos, y nosotros menos aún. ¿Por qué?
Imagínate que dentro de unas décadas somos capaces de llegar a otro planeta, o que hay gente que nos visita de otro mundo. La pregunta es ¿en qué creen? ¿Creeremos en lo mismo, o nosotros nos hemos montado una película que no tiene nada que ver?
.- ¿Qué sentiste con esas piedras talladas hace más de dos millones de años en tus manos?
Un cierto escalofrío. Hay veces que clasificas esas piedras sin pensarlo mucho. Un vez, excavando aquí en Rioja Alavesa, en Peña Larga, había un nivel de enterramiento que luego estaba quemado. Levantamos todos los huesos…
Recuerdo que estaba dibujando la estratigrafía. Los que estaban trabajando conmigo me habían dejado solo, porque paramos la excavación en ese momento. De repente me sentí incómodo, como si alguien me estuviera observando. Recuerdo que me levanté hasta en tres ocasiones para mirar a ver quién estaba a mi alrededor. No había nadie, pero tuve una sensación rara.
.- Cuando un profano visita un dolmen, puede ver solo piedras… Hace falta un libro, hace falta que alguien te explique qué es un dolmen y para qué servía.
Exacto. Y qué sentido tenía. El libro es para eso. Que los dólmenes no son un montón de piedras, sino mucho más.
.- ¿Qué diferencia al catedrático experimentado que eres de aquel recién estrenado profesor de Prehistoria de la UPV-EHU?
Aunque estoy en esa etapa de la vida que definen como el final, soy consciente de que me queda mucho por aprender. Yo sigo estudiando, sigo investigando. Sigo descubriendo cosas que me llaman la atención. ¿Diferencias? Que de mis muchas preguntas iniciales, ahora puedo tener alguna respuesta, más o menos.
.- ¿Con qué infraestructuras debiera contar Rioja Alavesa para explicar como es debido su Prehistoria?
Debiera tener un Centro de Interpretación del Megalitismo, que podría estar en Elvillar, donde he trabajado muchos años. Trabajando en Los Husos llegó un momento, en el 2001, en el que me dejaron quedarme a dormir en la escuela, y después en la Casa Parroquial.
.- ¿Es una necesidad para la Comarca ese Centro de Interpretación del Megalitismo?
Trabajando en el dolmen de la Chabola me he encontrado con gente que venía a ver el dolmen desde Australia. Lo mismo nos ha ocurrido con gente de Estados Unidos de América. ¿Cómo se han enterado de la existencia de este dolmen en países tan lejanos?
Que vinieran franceses o británicos no me extrañaba. Me da pena que vengan, vean las piedras y se marchen. Teniendo el patrimonio megalítico que tenemos, hay que darlo a conocer como es debido. Este libro es un primer paso. Ojalá el segundo paso sea la creación del Centro. ¡Daría mayor sentido al trabajo de tantos!
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Tantas cosas buenas diría de esta magnífica conversación! Qué regalazo de texto e imágenes!!!!
Enhorabuena al catedrático y al periodista.
Gracias, Jon.
Justo termino de leer tan cercana como interesante conversación. Emoción y escalofrío. Somos aquellos, sin duda!!!
Es lo que yo sentí, más o menos, Kerman
Me ha encantado ver los callos en la mano del catedrático Fernández-Eraso, jaja, el que mueve y remueve piedras y prehistoria. Pero no solo. Existe en todo lo que planteáis y decís un Yacimiento de ciencia y sentimiento. Os felicito y os doy mil gracias, más, un millón de gracias!
Un millón de gracias, Begoña… Dos millones!
Enhorabuena por este maravilloso artículo.
La prehistoria es una fuente de conocimiento e inspiración para la Humanidad.
Saber quiénes somos y de dónde venimos para saber dónde queremos ir.
En mis tours e itinerarios culturales en Rioja Alavesa siempre tenemos en consideración los mausoleos y abrigos del Neolítico, porque son patrimonio cultural y valorizan la Comarca.
Insisto en que enoturismo significa cultura del territorio. Desde Amelì Rioja tours siempre lo hemos hecho así.
Un saludo cordial, y por favor sigue así ?
Un saludo cordial, Amelia
Una vez más, cientos de veces más… no venimos del aire.
Recuerdo una historia, muy resumida: el personaje llega al pueblo, abandonado, del que salieron sus abuelos. Al entrar en la olvidada casa familiar, supo, sin palabras, que estaba en su sitio, con su gente.
Cuando leo esta historia de prehistoria, camino con ellos, siguiendo el río.
Eran muy valientes… y el mejor homenaje es respetarlos y no dejar que su recuerdo caiga en el olvido.
Un abrazo a todos los caminantes
Un abrazo, Alberto
Enhorabuena por este extraordinario artículo.- Es necesario un Centro de Interpretación para dar a conocer el patrimonio prehistórico de Rioja Alavesa.- Saludos cordiales.
Saludos cordiales, Francisco
Es ilusionante y esclarecedor ver que este «rinconcito» del mundo ha sido hogar para el hombre desde la noche de los tiempos. No todos somos conscientes de la suerte que tenemos de vivir aquí. Un lugar que no solo es vino; es cultura, es buen clima, es paisaje excepcional…
Cuántos tesoros arqueológicos estarán bajo nuestras viñas… Gracias por este artículo tan interesante y por ese libro que anima a conservar a respetar y seguir investigando.
Un libro que anima, Mar!
¡Qué de reflexiones provoca esta excelente conversación! Saber de dónde venimos nos tenía que hacer más sabios, generosos y amables. No hay duda de que así todo sería más fácil… Y más humano. Enhorabuena a los dos
Gracias, Rafael!
Fantástico artículo y muy interesante el tema para poder ilustrar tanto a los habitantes de Rioja Alavesa como a los visitantes y turistas. Siempre es bueno conocer más cosas sobre nuestros ancestros y nuestra historia, y sobre todo tratándose de la prehistoria. Ojalá sirva para divulgar estos conocimientos y estudios realizados por los diferentes equipos dirigidos por el Sr. Fernández Eraso. Ahora falta decirnos dónde se puede comprar el libro para adquirir estos conocimientos cuanto antes. Eskerrik asko
Juanma, el libro se puede adquirir a través de la página web del servicio de publicaciones la UPV-EHU, en las librerías Elkar y en la librería de Espe, de Elciego. Eskerrik asko.
La pista sur del aeropuerto de Palma de Mallorca arrasó un poblado talayótico, el embalse del Gorg Blau otro poblado y recientemente han encontrado restos de un asentamiento de época musulmana. Esto de arrasar con nuestro pasado es demasiado habitual. Gracias al profesor y enhorabuena por la entrevista.
Gracias, Pere. Un cordial abrazo
Estupendo reportaje. Habrá que leer el libro. Gracias por vuestra dedicación.
Gracias, Luis