Para que nos fijemos en esos pequeños islotes de biodiversidad que rodean o atraviesan nuestro viñedo. Una importante baza para el futuro de la Comarca.
CUARENTA MILLONES de cepas… pero sin olvidar un entorno VIVO.
Hace tiempo que tenía ganas de abordar este asunto de la peculiar e importante biodiversidad de Rioja Alavesa ya que, aunque hoy todavía es un tema menor y secundario en una comarca que aparenta ser solo viña y vino…
Miguel Larreina *
… en realidad es una baza importantísima que va a marcar en las próximas décadas el destino de Rioja Alavesa y otras pocas regiones vitícolas prestigiosas que tienen la interesante cualidad de tener entre las viñas (y junto a las viñas) unos hábitats que las hacen vivas y diversas.
El encargo que me hizo Bodegas Torres a principios de este verano de realizar un librito sobre este tema me animó a estudiar la biodiversidad de Rioja Alavesa-Sonsierra como otro hecho diferencial de la Comarca vinculado a su terroir y su paisaje. En este y en próximos artículos pretendo resumir este libro sobre la «Historia y naturaleza de la Rioja Alavesa. Pisadas de Labastida”, que hoy martes 16 de octubre de 2018 se ha presentado en Labastida.
RICA Biodiversidad de Rioja Alavesa (ilustraciones del nuevo libro de Miguel Larreina).
Las cuarenta millones de cepas de Rioja Alavesa se ven a menudo solo como decenas de millones de botellas de vino, cientos de millones de euros de facturación anual, un PIB muy importante o un bello decorado con posibilidades turísticas, pero son, además de todo eso, un entorno vivo por el que se mueven otros muchos seres vivos (plantas, insectos, reptiles, aves, pequeños mamíferos, seres humanos), utilizándolo bien como lugar de tránsito o escondite temporal, bien como nido o residencia, bien como despensa, lugar de caza o recurso vital.
Y se pasa por alto en Rioja Alavesa su naturaleza, su biodiversidad, su riqueza faunística y florística, porque, cuando observamos el paisaje desde una atalaya cualquiera, la vista se nos va al viñedo, y no nos fijamos en esos pequeños islotes de biodiversidad que rodean o atraviesan nuestro viñedo.
LAGUNAS…
Cierto que Rioja Alavesa tiene el 83% de la Superficie Agraria Útil (SAU) dedicada a la viña, teniendo el 17% restante de su SAU otras dedicaciones (cereal, huertas, olivos, almendros, eriales y pastizales), pero se pasa por alto que hay mucha superficie comarcal que no es SAU, que no tiene “utilidad” para la agricultura y la ganadería, pero sí para otras cosas como por ejemplo para monte, para bosque, para soto, para matorral, para río, para barranco, para ribazo, para lleco, para roca, para laguna, etc.
Ahí, en esa superficie “no útil” que implica el 40% de Rioja Alavesa, ahí es donde se sitúa buena parte de la flora y la fauna local. Lo que ocurre, lo insólito de esta estrecha comarca entre la Sierra y el Ebro, es que las superficies vitícola y no vitícola están juntas, imbricadas la una en la otra, y esa inmediatez le da al viñedo una biodiversidad que no se da en otras zonas.
Incrementar la biodiversidad se ha convertido en el gran objetivo de la viticultura del siglo XXI, buscando aumentar el número de especies y la población de animales y flores instaladas en el viñedo.
Especialmente se deja sentir este anhelo en zonas de viticultura reciente, en zonas en que antes de la filoxera apenas eran vitícolas y hoy son grandes llanuras irrigadas, con parcelas gigantes, por las que la viña ( y solo la viña) se extiende continua por miles de hectáreas . Esta moderna viticultura ha descubierto que la biodiversidad le es necesaria por muchos motivos y se ha planteado seriamente cómo mejorarla. Ensayos, estudios, tesis doctorales, equipos de investigación de los centros más importantes del mundo se han puesto a ello y han concluido que:
– La creación de hábitats dentro y alrededor de los viñedos es fundamental para aumentar su biodiversidad.
– La abundancia y diversidad de insectos y artrópodos benéficos dentro de una viña depende de la diversidad de plantas en la vegetación que lo rodea.
– Los chozos, muros y otras las estructuras vitícolas de piedra en seco son refugio de multitud de artrópodos, reptiles, pajarillos.
BARRANCOS…
– Los márgenes o linderos que poco a poco han ido desapareciendo de la viticultura actual juegan un papel crucial en el aumento de la biodiversidad; la presencia de setos u otra vegetación en los lindes de la viña propicia lugares de nidificación para aves insectívoras y para insectos que controlan las plagas del viñedo.
– Es fundamental diseñar corredores de plantas compuestos por diversas especies florales para facilitar el tránsito de los organismos desde los cercanos bosques y campos hacia las viñas Estos corredores sirven también como “carreteras biológicas” para el desplazamiento y la dispersión de depredadores de las plagas del viñedo.
– Crear islas con vegetación natural en el interior de una masa de viñedo aumenta el número de animales beneficiosos en el viñedo contiguo.
Veremos a continuación y en próximas entregas cómo muchas de estas propuestas novedosas de la “nueva viticultura que apuesta por la biodiversidad” ya las tiene el viñedo de Rioja Alavesa desde muchos siglos.
Por ejemplo, haber mantenido esa vieja estructura en mosaico, alternando las parcelas de viña con terrenos públicos improductivos, incluso en épocas complicadas en las que la concentración parcelaria o la reestructuración del viñedo parecía ser la panacea, ha evitado que se destruyeran los ribazos, los barranquitos, los llecos, las terracitas, los muros, los bancales, los viejos chozos guardaviñas, los senderos medievales, los lagares rupestres, las necrópolis, las ermitas olvidadas, los viejos topónimos, los vetustos olivos, los morcueros, los almendros solitarios, los bosquetes-islas de robles o encinas y otros hábitats singulares con su fauna y flora características.
ILUSTRACIÓN del libro “La historia y naturaleza de Rioja Alavesa” .
La marcha en esa dirección de potenciar la biodiversidad practicando una viticultura sostenible es imparable entre las regiones vitícolas más prestigiosas, de vinos más valorados, y nuestra comarca tiene, como veremos próximamente, unas bazas inmejorables para ganar también en este juego.
BOSQUES PRÓXIMOS a las viñas.
Son poderosas razones económicas las que impulsan a este sector vitivinícola hacia la sostenibilidad. Por un lado, hay que tener en cuenta la masiva y creciente afluencia de turistas que están viniendo a Rioja Alavesa atraídos, además de por la calidad de sus vinos, por el paisaje cultural, por la naturaleza, o por todo ello mezclado en diferentes proporciones.
Por otro lado, hay que considerar que son, por lo general, turistas de alto poder adquisitivo que ven lógico pagar un plus por comer o dormir en una zona privilegiada o por beber su vino extraordinario. Es ese plus el que permite practicar otra viticultura más razonada y sostenible, pues la rentabilidad de la explotación ya no se consigue incrementando los miles de kilos de uva obtenidos por hectárea, sino con menores producciones y más alto precio de las botellas.
ES TANTO lo que favorece la Biodiversidad de la Comarca!
Resumiendo, es la consideración del vino como un producto cultural respetuoso con la biodiversidad de la Comarca la que aporta un alto valor añadido que justifica, entre otras cosas, un modelo de vitivinicultura más sostenible, más costosa, más manual, menos mecanizada, más romántica, más de mula que de vendimiadora mecánica, más respetuosa con el paisaje y el medio ambiente, más atractiva para el visitante.
*Escritor.
Suscríbete a nuestra Newsletter
Acepto que Blog Rioja Alavesa utilice mis datos para acciones de marketing
Recibe nuestras novedades
Newsletter
Acepto que Blog Rioja Alavesa utilice mis datos para acciones de marketing
De nuevo Miguel nos sorprende con este libro.
Conocimiento, saber transmitir, e imaginación en los temas que abarca son componentes importantes para llegar a un producto final que, estoy convencido, nos sorprenderá.
Es de agradecer el poder contar con estos libros, para poder disfrutar, con conocimiento, de esta zona de Rioja Alavesa tan fantástica.
Muchas gracias, Fernando. Bien sabes que estamos esperando con ilusión vuestro libro sobre “El olivo en Rioja Alavesa, compañero centenario”. Saludos cordiales.
Son líneas de un gran contenido, de buena ecología, las que tenemos hoy en este blog.
Cultivar estas tierras porque son el medio económico que tenemos de vida, hacerlo permitiendo que la naturaleza se siga expresando en los llecos, ribazos, cerros, lagunas.. . En esos baldíos encontramos la huella del clima reciente, en esos aromas de flores silvestres vamos a encontrar los aromas que acompañan nuestros guisos y nuestros vinos.
Martin, en Elciego, era el mejor pastor. Lo sabía todo, seleccionaba bien los carneros y todas las ovejas se le preñaban, las guardaba en el corral que llamábamos de Domingo Lamar. Y su basura era tan apreciada por mi abuelo que era el dueño como las chuletitas de riñonada por su hermano Crescencio. De este he heredado el “saque”.
Entre tanta nostalgia, no quiero dejar escapar la tajada más sabrosa, cuando hablas de valor añadido en la botella, de codicia por hacer de la calidad y la diferenciación nuestro estandarte, nuestra gran aportación a estas tierras Alavesas, de La Sonsierra…
Los “excesos” son pan para hoy y hambre para mañana.
Y que sepamos corregir algún error de medición que hemos cometido con nuestras hectáreas históricas De sabios es rectificar, más vale ponerse un día rojo que cien amarillecidos. Busquemos la solución. Los desechos históricos para Alava son sagrados y esta tierra es a lo que no puede renunciar. Estamos lejos pero nos tenemos que sentir queridos y defendidos en aquello que concierne nuestra huella identitaria. Paisaje, paisanaje y prosperidad unida al vino. Un buen vino cuesta dinero y una Diputación que se precie sabe que tiene en sus manos el SELLO de la identidad y de la prosperidad. Toca luchar, toca dar la cara.
También Martin traía corderitos en su zagal y cuidaba a cada oveja. “Conozco a mis ovejas y las llamo por su nombre” son cosas de más calado que el folclore.
Muchas gracias, Victoria Cañas. Saludos cordiales.
Eso. Abramos ventanas y ventanales para mirar con mayor detalle la Naturaleza. Mola la rica diversidad. Para mimarla. Y claro, ampliarla. Una de mis palabros es coexistencia
Muchas gracias, Txiki. Saludos!
Qué interesante el contenido de ese libro. Ya el artículo me parece una lección de lo más atractiva y no digamos adornado como está con esas ilustraciones tan especiales, tan bonitas.
Me alegra saber que Rioja Alavesa no se sorprende con propuestas novedosas porque su viñedo las tiene y hace mucho tiempo, siglos. También me alegra conocer a qué se le llama estructura en mosaico y los beneficios, la importancia que ello implica.
Lo de los corredores de plantas que sirven también de carreteras biológicas para que se dispersen los depredadores …bueno, son lecciones que no sé qué tienen que aún siendo profana en la materia no dejo escapar una palabra de lo que dicen.
De ahora en adelante, cada vez que compre una botella de vino no me pasará por la cabeza que está cada día más caro. Pensaré que hay un gran esfuerzo alrededor de esa botella, un primar la calidad y no la cantidad, una biodiversidad envidiable en la tierra de donde proviene: Una flora y una fauna y un paisaje. Y topónimos como en ningún otro lugar. Y una historia antigua y gente orgullosa que tiene el pasado bien presente, gente que avanza para mejorar y conservar la riqueza de la tierra que posee.
Muchas gracias, Karmele. Saludos cordiales!
Gracias a todos por vuestros comentarios y lecciones. Os lo digo con sinceridad, tras estudiar con calma este verano este tema de la biodiversidad, he vuelto a sorprenderme al ver que también en esto la Rioja Alavesa sobresale.
Muchas gracias, Miguel. Saludos cordiales!
Gracias Miguel, por tu incansable trabajo. Estoy convencido de que a los viajeros que vienen a esta tierra además de la calidad de nuestros vinos, les sorprende gratamente el paisaje cultural, la naturaleza y la viticultura sostenible de esta Rioja Alavesa.- Sigamos por ese camino. Gracias. Saludos
Muchas gracias, Francisco Mtz de Cañas. Saludos!